Respondiendo a las crecientes preocupaciones de que las personas, especialmente los adolescentes, estén pasando demasiado tiempo mirando sus teléfonos inteligentes, Apple ofrece una nueva herramienta para ayudar a los usuarios de sus iPhones a administrar el tiempo que pasan en sus dispositivos.
La Conferencia Mundial de Desarrolladores 2018 de Apple comenzó el lunes en San José con una vista previa del nuevo sistema operativo iPhone-iOS 12-que incluye la herramienta Screen Time que proporciona un tablero que permite a los usuarios rastrear la cantidad de tiempo que pasan usando aplicaciones y colocar límites en aquellos que están usando en exceso.
El uso excesivo de teléfonos inteligentes a menudo resulta de la comprobación habitual de aplicaciones de los usuarios, según Craig Federighi, vicepresidente senior de ingeniería de software en Apple. «Algunas aplicaciones demandan más de nuestra atención de lo que podríamos darnos cuenta», dijo Federighi en la conferencia. «Se ha convertido en un hábito que tal vez ni siquiera reconozcamos lo distraídos que nos hemos vuelto».
Apple preocupado por la smartphones-adicción de los adolescentes
Federighi también dijo que Apple ha «pensado profundamente» sobre el tema de la adicción a los teléfonos inteligentes y como resultado ha lanzado un «conjunto completo de funciones integradas para ayudarlo a limitar las distracciones, concentrarse y comprender cómo está gastando su tiempo».
Federighi argumentó que la herramienta Screen Time será particularmente valiosa para algunos niños y «puede ayudar a las familias a lograr el equilibrio adecuado para ellos». Los padres reciben un informe electrónico de la actividad en línea de sus hijos y tienen la capacidad de crear «asignaciones» para la aplicación uso así como el «tiempo de inactividad» forzado, que se puede gestionar de forma remota desde dispositivos parentales.
En enero, dos grandes accionistas de Apple escribieron una carta a la empresa de Cupertino, California, instando al gigante tecnológico a crear formas para que los padres restrinjan el acceso de los niños a sus iPhones, mientras piden un estudio de los efectos del uso intensivo en la salud mental.
Mediante el uso de pruebas estandarizadas de adicción a internet y teléfonos inteligentes, los investigadores descubrieron que los adolescentes adictos tienen puntajes significativamente más altos en depresión, ansiedad, severidad del insomnio e impulsividad. De hecho, un estudio presentado en 2017 en la Sociedad Radiológica de América del Norte mostró un desequilibrio en la química cerebral de jóvenes adictos a los teléfonos inteligentes e Internet, utilizando la espectroscopía de resonancia magnética, un tipo de resonancia magnética que mide la composición química del cerebro.